sábado, agosto 11, 2012

La Feria

(Obra: Josué Romero Córdova)

no he podido comprender
los sonidos entre la mañana y la tarde
es medio día, por supuesto,
pero no hay sol,
más bien
las nubes grises se han puesto.

a lo mejor vendrán las gotas
a lo mejor vendrán palomas
a lo mejor se van las gotas
a lo mejor se quedan rotas
las montañas
las ruedas de chicago
se romperán los alambres
y las bocinas no sonarán más...

no he podido comprender
los sonidos de la tarde y la mañana
ni las miradas ni las andadas
bajo la lluvia
bajo las tardes medio soleadas
ya casi hay sol
no, en realidad no; siguen las nubes, y el viento, brilla por su ausencia...

no vino ninguna paloma
ni se fueron las gotas a ningún lado
porque nunca llegaron a ningún lado
siempre caen y se pierden por todos lados,
las montañas ya no están verdes
esas siguen rotas,
nos cuentan como los alambres las han ahorcado
con sus postes y sus cargas de fuego humano,
en cualquier momento, todo estará consumado...

las ruedas de chicago están quietas
no quieren ser otras ruedas,
no te hacen caso si les llamás como: ruedas de jocotenango por ejemplo,
ellas no quieren cambiar nada,
lo único que cambian es de lugar, de vez en cuando,
como vos,
cuando no respondiste más a mis intenciones,
cuando nos dijiste, yo me llamo... ¿te acordás?

ya es tiempo de salir,
la gente se reúne nerviosa y bien limpia y vestida
a ver lo mismo
a saludar a las mismas personas
a pararse en los mismos lugares
no se saludan más, es normal tenerle miedo a los extraños...

a la par de las ruedas
en frente de sus caras
bajo las gotas de una o dos nubes
recibiendo la caca de las palomas
esas que ni siquiera llegaron,
estamos todos los perros de la calle, esperando...

así como ustedes, los que leen, así estamos... esperando desesperadamente,

muchas veces no entender nada
es el mejor regalo para celebraciones humanas
como en las que ustedes y yo
quedamos echados mojados cansados y con hambre... como perros.

que viva guatemala, el país de los perros eternos.





1 comentario:

Anónimo dijo...

Bello texto, es una vitamina pa levantarse. Un abrazo grande.

Marré